La posición que utilizas para dormir te puede revelar lo que padeces.

No es ningún secreto que dormir es una de las cosas más cómodas en la vida de todos, así que esta vez hablaremos sobre lo que quiere decir tu posición de dormir.

Es muy importante que sepas que estamos dando esta instrucción para cuidar tu columna, la columna se ve más afectada si decidimos dormir en una mala posición, pero no solo la columna se ve afectada la respiración y el corazón también se ven afectados.

Si no quieres problemas de salud graves, lo mejor es seguir las siguientes líneas. Si eres de los que duermen boca arriba, cuéntanos que esta posición no es la más recomendable porque relaja nuestra lengua, lo que demuestra que este órgano normalmente se contrae y provoca problemas respiratorios.

Puede despertarte en cualquier momento. Además, esta posición puede causar fuertes dolores en la espalda y en la mayoría de los discos intervertebrales que forman la columna vertebral.

Los expertos de la Escuela de Medicina Johns Hopkins, por otro lado, recomiendan que todos duerman de un lado, ya que esta posición facilita que las vías respiratorias permanezcan despejadas durante el sueño.

Pero esos no son los únicos beneficios de esta posición para dormir, ya que puede reducir los ronquidos, el dolor lumbar y la apnea del sueño. Además, si sueles dormir sobre tu lado derecho, te contamos que lo más probable es que padezcas reflujo gastroesofágico y acidez estomacal.

Para prevenir estos problemas, lo mejor es dormir sobre su lado izquierdo para asegurarse de que no experimente estos problemas.

Además, si eres una de esas personas que se preocupan por su apariencia, hemos descubierto que dormir de lado o boca abajo no es una buena idea porque si lo haces todos los días, existe la posibilidad de que termines con un paño Rostro en muy poco tiempo Lleno de arrugas y un poco difícil de disimular.

Se recomienda dormir en posición fetal, sobre el lado izquierdo, con los brazos extendidos. Ahora que conoce esta información, simplemente comience a dormir en posiciones que protejan su columna, respiración e incluso su piel.